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| Dos caras de la moneda |
Existen diversidad de mitos respecto a cómo cobrar eficientemente por los servicios que se ofrece a determinado cliente. Algunos profesionales piensan que al actualizarse continuamente podrán cobrar más, otros opinan que la experiencia lo es todo; existen otros que sin experiencia ni conocimiento quieren cobrar lo mismo que alguien que lleva 3 años laborando en la misma industria. ¿Sabes cobrar lo justo, conoces el estándar de salarios que se maneja en tu zona, ofreces solo un servicio o aportas resultados a tus clientes? Éstas y más preguntas debes de hacerte antes de definir el cobro de tus servicios.
A continuación te mencionaremos una breve lista de factores que debes considerar para cobrar bien por tu trabajo.
1. ¿Cuánto tiempo llevas trabajando en la misma área?. No es lo mismo trabajar en “iguanitas” haciéndole de todo durante 3 años, y finalmente no especializarse en nada, a laborar y aplicar lo aprendido durante 3 años consecutivos en un mismo tema.
2. ¿Qué grado de dificultad tiene la actividad que realizas?. Si lo que haces hoy en día lo puede aprender fácilmente otra persona entonces no pretendas cobrar tus servicios como únicos, cuando existe demasiada oferta. No significa que por realizar una actividad sencilla debas cobrar menos, pero sí lo justo con respecto a alguien que lleva a cabo tareas más complejas.
3. ¿Ofreces algo realmente diferente o tu trabajo es igual al de otros proveedores?. En este ambiente tan competitivo en el que se vive en el país debes encontrar tu “valor agregado”, sí, eso que te diferenciará de los demás. Si solo repites tu labor como otras 100 personas más entonces es hora de innovar y ofrecer más que otros, y recuerda, esto es por el mismo precio. Sino dejaría de ser valor agregado.
4. Capacitarte continuamente no siempre significa que debas cobrar más por tus servicios. Capacitarte es una tarea intrínseca(esencial) de un profesional, si lo haces es porque quieres realizar mejor tu trabajo. El dinero viene como “añadidura” al ser bueno en una actividad. Pero no es obligatorio recibir más por capacitarte más. Recuerda que los logros son personales y el que crece como profesional eres tú. Las oportunidades estarán a la orden del día si decides invertir en ti mismo.
5. ¿Conoces a tu cliente, a todos les cobras por igual?. Aclaremos el punto, no es lo mismo trabajar para una PYME que para una gran empresa. Si eres colaborador sea en un taller o una oficina contable identifica en qué nivel de crecimiento se encuentra la misma y ofrece un sueldo acorde. En el caso de que trabajes de forma independiente y te hagas cargo de la cobranza, ten en cuenta que no es lo mismo hacer un trabajo de jardinería a una casa que mensualmente crece su jardín, a realizar una remodelación de una oficina o a diseñar un edificio de apartamentos.
6. Y finalmente la pregunta del millón, ¿cuántos años llevas realizando la misma actividad eficientemente?. Trabajar por años haciendo algo es sencillo comparado con el hecho de trabajar eficientemente ofreciendo resultados a tus clientes. ¿Le has preguntado a tus clientes si están satisfechos con tu trabajo? Si es así podrás cobrar cada vez un poco más.
Recuerda que la autoevaluación es la forma más eficaz de crecer.
Sé objetivo y capaz de observar tus áreas de oportunidad, cuando las identifiques y las pulas entonces podrás cobrar lo justo por tus servicios. ¿Qué otro factor agregarías para cobrar mejor por tus servicios?.
Ahora, veamos el otro lado de la moneda: